Después de haber leído The Book Thief de Markus Zusak decidí
ver la película. Ya sabía que eso sería
problemático, por eso de las expectativas que uno se hace de lo que debería ser
la versión fílmica. Cuando uno lee, no puede evitar, de algún modo, ir haciéndose
su propia película mental. Nos imaginamos el barrio, los personajes, las
expresiones. En fin que ver una película sobre un libro, especialmente si nos
ha gustado, presenta un reto especial: darle un trato justo a una representación
visual de una obra.
La mayoría de las
películas aclaran que el film está basado en la novela, o sea, NO es la
novela. Igual sucede cuando es una
versión fílmica de una biografía o de algún acontecimiento histórico. Supongo
que eso le ofrece flexibilidad al guionista (quien re-escribe la obra) para
jugar con la historia. Pocas veces el guión se ajusta fielmente a una u otra
novela. Creo que el medio visual no lo permite.
Por ejemplo, el narrador en The
Book Thief es la muerte. Es a través de sus ojos que vemos y conocemos a
los personajes. En la versión fílmica la muerte no interviene sino al comienzo
y al final. Y es lógico porque si podemos ver lo que sucede, y a quien le sucede
no precisamos de alguien que nos describa todo lo que ocurre ni cómo se ve el
cielo ese día. (Como aparte, yo creo que debieron eliminar al narrador del
todo…).
Muy pocas versiones
fílmicas complacen a los fanáticos de la versión escrita. Todo el que haya leído
un libro, el que sea, y después ve la película se siente defraudado. (Creo que
los de Game of Thrones lo han hecho
bastante bien y bastante fiel al mundo creado por Martin) En el caso de The Book Thief los
guionistas obviamente tuvieron dificultades en proyectar la poesía, los
colores, la centralidad de la letra escrita que predomina en este libro. Liesel
Meminger, la protagonista, es una niña solitaria que encuentra solaz en los
libros aun cuando al principio no es capaz de descifrar su contenido. Cuando
por fin aprende a leer, lee y re-lee con tal de aprehender las palabras,
capturar su esencia. Sin embargo, la película se centra en la trama y ahí es
que el lector chilla y recula. Y eso no quiere decir que la trama no sea
original. Aquí se narra la historia del nazismo desde la perspectiva de los alemanes
con inclinaciones comunistas. Liesel (Sophie
Nélisse), y su amigo Rudy (un personaje adorable en la novela) no han sido
convertidos al nazismo y cuestionan las acciones de sus compatriotas. El único
judío que juega un papel central, Max, es un artista que inventa un mundo de
palabras para Liesel y le permite a la niña escribir su propia historia. Le enseña cómo representar al mundo en palabras cuando le pide a Liesel, ya que el no puede salir a la calle, que le describa el día y su entorno.
En The Book Thief (film) la representación de los
personajes tampoco es convincente para mí. Aunque cuenta con dos actores
importantes como Geoffrey Rush en el rol del padre adoptivo y de Emily Watson
como la madrastra, el director no logró capturar la callada dulzura de Hans ni
la tierna gruñonería de Rose-- aquí
digo, estoy prejuiciada por la lectura del libro puesto que al colega le gustó
Hans Hubermann aunque no Frau Hubermann. Liesel, la encontré demasiado bonita, demasiado
estilizada para Liesel quien en el libro es hasta un poco machúa (tomboyish) y siempre
anda enredada con los niños jugando futbol y peleando..no hay otras niñas en la obra (¿porqué será eso?). Rudy pierde también
fuera de la novela. El colega lo percibió como un majadero impertinente y
es uno de los personajes más adorables de Zusak. Es leal, tierno, gracioso...valiente.
En fin que recomiendo la
lectura definitivamente y la película sólo si no ha leído la novela.
4 comments:
Pues me alegro no haber leído la novela porque me fascinó y me sufrí la película.
Ivonne, puesto que ya viste la película ahora puedes leer la novela sin temor a la decepción. :)
Gracias por comentar.
Me motivas a leerme la novela!
Elba,
You'll like it. Thanks for dropping by.
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