para José
En esta semana pasada diversos grupos y personas atacaron a la
candidata a la gobernación por el Movimiento Victoria Ciudadana, la licenciada
Alexandra Lúgaro, por hablar del “white privilege”. Como todo lo que dicen los políticos
a esta altura, sus expresiones fueron tergiversadas y se creó todo un reperpero
en las redes. Como resultado, Lúgaro
procedió a explicar en su página de Facebook y en Instagram lo que ella quería
decir cuando hablaba del privilegio de ser blanco.
Tengo un amigo que como profesor de Educación en California
State University, Sacramento lleva años hablando sobre “white privilege” y
tratando de que sus estudiantes, todos maestros, entiendan cómo ser blancos les
ofrece ciertos privilegios de los que no gozan los que no lo son. Sus charlas
sobre este tema han producido consternación, aceptación y hasta rechazo de sus
estudiantes. Algunos lo han acusado de “reverse discrimination” y hasta de odio
a la clase privilegiada. Y es que no es
fácil reconocerse como persona que goza de privilegios si también se es pobre o
se ha sentido alguna vez rechazado, supongo.
No es fácil explicarle a un blanco pobre lo que significa
“white privilege”. Supongo que sería más fácil hablar simplemente de
privilegios, o sea, aquellas ventajas que nos confiere el estatus social,
porque ese es un tipo de privilegio particular que afecta a la mayoría de las
personas y que muchos entendemos. Por ejemplo, quienes son nuestros padres,
donde nos criamos, donde fuimos a la escuela, si tenemos grados universitarios,
la cantidad de libros que leemos o nos rodean, los amigos que tenemos, adonde
viajamos, cuales actividades o deportes hacemos. Todas estas cosas determinan
cuan privilegiados somos. Hay ejercicios que utilizan los educadores para
hablar de privilegios primero y después del privilegio atado a una raza en particular.
(Abajo incluyo varios enlaces). Uno en particular recrea una carrera, pero
antes de que empiece la carrera se le van haciendo preguntas a los concursantes
que los convida a dar un paso al frente. Preguntas como, si no vienes de padres divorciados
da dos pasos al frente, si fuiste a una
escuela privada da dos pasos hacia el frente y así sucesivamente. De manera que
los blancos acomodados quedan al frente. Lo que intenta reflejar es que los que tienen más ventajas, tienen más oportunidades de ganar. Véanlo, es fascinante.
Hablar del privilegio de ser blanco no quiere decir que si
eres blanco nunca has tenido que luchar por nada. Hay muchas personas blancas
pobres que sufren hambre y a quienes se les hace difícil mantener un trabajo
bien remunerado o pagar alquiler. La mayoría de las personas que tienen
trabajos buenos o han alcanzado el éxito han tenido que trabajar para lograrlo.
El privilegio blanco es una ventaja que se le confiere a una persona por el
simple hecho de pertenecer a una raza particular y considerando que todo lo
demás sea igual. O sea, dos personas, una blanca y una negra, tienen los mismos
ingresos, la misma preparación académica, la misma personalidad pero el blanco
es el seleccionado para una posición y el negro no. Que conste que esto no
ocurre solo con los negros sino también con otros grupos minoritarios, o lo que
en Estados Unidos llaman, "people of color."
La muerte de George Floyd a manos de un policía blanco ha
sacado a relucir nuevamente no solo el problema del discrimen racial en EEUU y
la brutalidad policíaca sino también el “white privilege” y sus secuelas. Sin
embargo, este incidente en el que murió Floyd es solo la gota que colmó la copa
pues la brutalidad policíaca, especialmente contra los de raza negra es
historia vieja. No voy a documentar esto aquí porque es fácil encontrar el
número de casos con una simple búsqueda en Google.
Otros vídeos:
Artículo de Peggy Macintosh de 1988 identificando “white
privilege”.